Por fin juntos.

Por fin juntos.
Un sueño hecho realidad, por fin juntos los dos.

jueves, 1 de agosto de 2013

Solo...

No quiero dejar de pensar en ti, y en el gran amor que me das.

Primer aniversario:

El tiempo ha pasado, nuestro amor ya es un hermoso bebe de un año de vida.

Los días pasaron y nos hemos conocido cada vez más, y aún nos falta conocernos otro poco, pero eso significa que nuestro amor no parará  de crecer.

Han pasado los meses y siento que sí faltarás en mi vida, todo perdería su valor, los colores su sensibilidad, el fuego su calor, el viento su libertad, y yo la existencia, pues tú eres mi corazón, y es el corazón el que hace que la sangre circule por todo el cuerpo, tan importante es, que hasta el celebro depende el.

En mi existencia siempre desee una mujer que me llenara como hombre, que me hiciera concentrarme, aparte de Dios, en ella, una mujer que fuera mi norte, sur, este y oeste, que fuera mi todo, pero que jamás fuera más que Dios en mi vida, que supiera respetar esas prioridades en mi vida.

A esa mujer había de amarla con todas mis fuerzas, no la dejaría perder tan fácilmente, la haría feliz, aún si eso significaba tener que cambiar para que ella fuera feliz, ella sería la dueña de mi tiempo, y de mis pensamiento, pensaría en ella y oraría por ella al levantarme y al acostarme, porque sabría que como ella no habría dos en el universo... ¿ pero cómo iba a reconocerla? El mundo está lleno de maldad y dolor, y yo, que le estaba pidiendo a Dios un tesoro tan grande, pues esta mujer lo amaría más a Él que a mi, y yo definitivamente no tendría oportunidad en su corazón, así que puse requisitos para saber  que era ella, luego de haber orado por lo espiritual, comencé a orar por lo físico, pero sabía que no la merecía por mi maldad contra el Santo de Israel, aún así oré por ella, diciendo que deseaba que fuera grata a mis ojos, que cuando la viera pudiera decir: " por Dios, que mujer tan bella" siempre supe que a nuestro Creador había que hablarle con sinceridad, así que aún por el tamaño de sus senos puse en petición así: " me gustaría que sus senos no fueran muy grandes" ore absolutamente por todo, día por día, hasta por el olor femenino que a mi me gustaba, aún en los días de mi maldad le pedí al Rey del cielo y de la tierra, que siempre la guardara, que no la dejara conocer el mal, como yo lo había conocido, que la protegiera del abuso sexual, y de los vicios. Que la guardara siempre en sus caminos... Realmente al verme en tan mal estado por mi maldad, jamás creí conocerla, y para añadirle más especificaciones al asunto, pedí por el tesoro más grande que un hombre puede recibir de una mujer, un tesoro que   no puede ser comprado ni con todos los diamantes, oro y rubíes del mundo, juntos, un tesoro que sólo ella podría saber cuanto vale de verdad. Un tesoro que sólo se puede hallar en ella misma, su virginidad.

Sabía que estaba pidiendo por un imposible, así que no lo puse como una exigencia de mis peticiones, sino como un obsequio personal del Creador, pero entre más me alejaba de Él, menos cercano veía posible ver a la mujer con la que soñaba pasar mi vida, la esperanza estaba perdida, pero aún así, siempre que me acordaba, sin saber quien era, como se llamaba, donde vivía, cual era su rostro, yo le pedía al Señor, en el nombre de Jesucristo de Nazaret, que la guardara de todo mal y peligro.

Para el año 2012 estaba comenzando a apartarme de mi maldad, pero las cosas no me salían bien, a la persona que cría querer, decidió dejarme, así que seguí mi vida en el mundo virtual, una vida que no llena para nada el vacío afectivo que como hombre sentía, y ya mi pensamiento de encontrar a la mujer de mis sueños, era sólo eso, un sueño.

Listo para rendirme, y sin esperarlo, llego una señorita muy decente, que se le notaba que le importa mucho lo relacionado las cosas del Señor de señores, hable con ella y me encariñe el triple de rápido de lo que suelo encariñare con alguien, y oré por ella, ya que empezaba tener miedo de que se alejara de mi, y puse mi destino en manos del Rey de reyes, la puse a ella en sus manos, las cosas se dieron más rápido de lo que yo pensaba, y un día no pude sopórtalo más, necesitaba que supiera que en mi había un sentimiento mucho mayor a un capricho, mucho mayor que un deseo, ese sentimiento era amor, y se lo confesé, porque el tiempo que pase hablando con ella, ese tiempo me mostró que mi oración, mi esperanza  habían sido escuchadas, que no habían sido hechadas al olvido, y aunque se que no merezco una mujer como tú, estaría dispuesto a morir sin miedo, por el simple hecho de que tu pudieras seguir con mi vida, pues tú eres mi vida, te amo, y quisiera decir otra palabra que sea más fuerte que esa, pero en verdad no hay una palabra que sea mayor al amor, te amo, y lo puedo jurar con la sangre que corre por mis venas, la sangre que sólo Dios me dio para vivir, mi amor por ti no es un juego, no es una simple palabra, no es maldad oculta, mi amor por ti es genuino, es puro. 

Ahora que hemos cumplido un año, ahora que me conoces un poco más, sabes que por ti sería capaz de todo, incluso de vivir, pues me das las fuerzas que siempre imagine que me darías para vivir, desde antes de conocerte, Andrea, ya te imaginaba así, ya te deseaba con todo mi corazón, ya lo eras todo para mi, por eso no puedo alejarme de este sentimiento que me ata a ti, porque desde antes de conocerte, ya estaba ligado a ti.

Te amo, y aunque soy de Cristo, por favor, por favor, permíteme quedarme junto a ti, hasta que Jesucristo nos llame a su presencia, por favor, permíteme ser tuyo por siempre, mi vida.

Por favor, nunca me niegues tu amor, ni tu presencia, la verdad eres todo lo que me queda para aferrarme a la vida, jamás creí encontrarte, jamás pensé que Dios me escucharía y te pondría en mi camino, jamás imagine que te amaría como lo describí en mis oraciones, en verdad, mi corazón, lo eres todo para mi, sin querer provocar a celos al Santo de Israel, pues Él es mayor, tu lo eres todo para mi, cumplamos muchos siglos juntos ¿ vale? 

Siempre has de estar en mi corazón porque...
Te amo.

El Señor...

Haga resplandecer su gloria sobre ti,
Haga descender su Santo Espíritu en ti, 
Haga realidad todos los deseos de tu corazón,
Preste atención a todas tus oraciones,
No aparte de ti su amor, misericordia, gracia y perdón,
Y siempre te cubra con su mano poderosa, poniendo millares de sus santos ángeles al rededor de ti, 
Y puedas ver la derrota de todos aquellos que procuren tu mal, en todo aspecto.

Mi princesa, te bendigo en el nombre de nuestro Señor Jesucristo de Nazaret, y lo escribo aquí, para que quede de testimonio para el futuro.

Mi amada, te amo, eres un hermoso ser de luz, la gloria de Dios resplandece en ti, mi alma está ligada a ti, te deseo con todas mis fuerzas, pero te amo aún el doble, gracias le doy al Señor por nuestro amor, el se merece la Gloria por esta relación que a sido de bendición, gracias por seguir a mi lado hasta el día de hoy, y los próximos tiempos.

TE AMO.